Opinión de Gabriela García
Activista del Movimiento Antorchista de Zacatecas
Hasta los viajes cortos por carreteras estatales o federales dentro del territorio zacatecano se hacen tardados y peligrosos debido a que las vialidades se encuentran bastante deterioradas y no se diga de los caminos rurales o terracerías en las cuales es imposible tener una movilidad medianamente rápida y segura.
Y el problema no sólo es de las comunidades apartadas, sino que las arterias de la zona conurbada están llenas de baches profundos en que el conductor debe ser muy cuidadoso para no caer, pues en un descuido su modesto auto puede quedar seriamente dañado y los gastos de reparación correrán a cargo del ciudadano.
Trato este asunto porque es muy común escuchar en los tiempos de campaña y luego en los del cambio de administración “que ahora todo cambiará”, por ejemplo, el 20 de noviembre de 2016, dos años antes de que fuera Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) presentó el llamado “Proyecto Alternativo de Nación” donde afirmaba que en su gobierno la gasolina “no costaría 14 pesos, costaría 10 pesos el litro”.
A estas declaraciones se sumaron en su momento las de Mario Delgado, hoy líder nacional de Morena clamando por “¡Ya no más gasolinazos!”, que también replicó la actual secretaria General de Morena, Citlalli Hernández asegurando “Si Morena ya gobernara, la gasolina costaría máximo 10 pesos el litro”.
Destacan también las declaraciones de Soledad Luévano, actual senadora de la república, que prometió que las carreteras quedarían arregladas desde el primer año de gobierno de AMLO y sus promesas huecas son de las cosas ignoradas por el de palacio nacional, que le importan el Aeropuerto Felipe Ángeles, el Tren Maya y la refinería Dos Bocas, es evidente que sus prioridades no están en Zacatecas.
Pasados los años se confirma que esos compromisos son cosas imposibles, que fue propaganda que ha servido al mandatario para mantenerse activo, antes como aspirante al gobierno federal y ahora ya como su titular. López Obrador tomó el poder el 1 de diciembre de 2018, han pasado casi mil días de su gobierno y esas promesas no se han cumplido.
Pero volvamos al tema local. Se anuncia que desde el primer día del gobierno electo de David Monreal iniciará el programa de los “100 días”, con la reconstrucción de carretera, aseguró que en su administración se habrán de multiplicar acciones para avanzar hacia el desarrollo y transformación con el recurso proporcional de este ejercicio fiscal que le corresponde a partir de su toma del poder.
Como es sabido, el gobernador saliente estuvo gestionando los recursos para este propósito ante la federación dejando constancia de su insistencia en las visitas AMLO a la entidad pero no se tuvo respuesta positiva, siendo evidente el desprecio que dedicó al mandatario de Zacatecas perjudicando a todos los ciudadanos.
Hasta donde se conoce, sigue pendiente el ofrecimiento de apoyar al gobierno priista con mil millones de pesos para obras primordiales, pero en cada visita que tiene López Obrador también se queja de lo intransitable que están las carreteras, olvidando que tiene casi tres años en el poder y aquí no se ha visto la luz de la transformación.
Por todo lo dicho son positivas las declaraciones del gobernador electo, seguramente ya hizo cálculos, ya sabe de dónde sacará los recursos para empezar su proyecto resolviendo esta necesidad que es con la aplicación de nuestros impuestos.
Y desde luego se espera que haya un cambio de trato desde la federación, que como se dijo, con Alejandro Tello estuvo totalmente cerrado, regateando recursos que legalmente le corresponden al estado. Es de esperar, además que la austeridad no sea motivo de abandono del gobierno entrante para resolver las necesidades de la gente, es primordial mejorar las condiciones de vida de los zacatecanos.
Mientras tanto seguiremos transitando en lo que queda de las carreteras que hicieron los gobiernos del pasado porque ya han transcurrido casi tres años de la transformación y no hubo obras nuevas ni se les dio mantenimiento preventivo a las existentes.
Llegó la época de los gobiernos morenistas para que resuelvan las demandas más elementales en colonias y comunidades; ahora que están alineados federación, estado y municipios se tendrán óptimas condiciones políticas, de entendimiento, coordinación, así como de asignación de recursos que podrán aplicar los tres niveles de gobierno.
Pronto veremos la capacidad de Monreal poniendo en práctica todos sus conocimientos, capacidades y creatividad sirviendo al estado, y sus gobernados deseamos sinceramente que a partir del 12 de septiembre terminen las tragedias y se logren efectivas transformaciones en Zacatecas, de lograrse esto, se confirma el castigo que López Obrador aplicó al gobernador saliente por no ser de su partido, pero se tendría la inobjetable ventaja de que el cambio a Morena fue para bien y tendría que verse reflejado en el bienestar. ¡Veremos dijo el ciego!